Desde hace un tiempo a esta parte se ha desatado una campaña, realmente intensa, donde se destacan las "virtudes y ventajas" de comprar artículos de marcas reconocidas, denostando de mil maneras a las "marcas blancas".
Resulta ser como la pescadilla que se muerde la cola. Están atacando a los demonios que ellos mismos crearon.
Recuerdo que en la década de los 70, aparecieron en Buenos Aires, primero en la zona de Av. Díaz Vélez y Gallo y luego se expandieron a Av. Boedo, una serie de comercios de electrodomésticos a los que se conocía como los "bolseros".
Era simple, a un fabricante de electrodomésticos necesitado de dinero, le resultaba enormemente más ventajoso vender stocks, aún por debajo del costo, antes que pedir dinero prestado al banco.
¿Por qué? Simple.
Resulta ser como la pescadilla que se muerde la cola. Están atacando a los demonios que ellos mismos crearon.
Recuerdo que en la década de los 70, aparecieron en Buenos Aires, primero en la zona de Av. Díaz Vélez y Gallo y luego se expandieron a Av. Boedo, una serie de comercios de electrodomésticos a los que se conocía como los "bolseros".
Era simple, a un fabricante de electrodomésticos necesitado de dinero, le resultaba enormemente más ventajoso vender stocks, aún por debajo del costo, antes que pedir dinero prestado al banco.
¿Por qué? Simple.
- Primero: no tenía que devolver ningún préstamo, puesto que simplemente recuperaba recursos inmovilizados.
- Segundo: Se quitaba de encima un enorme stock que se le había acumulado por el bajo nivel de ventas (crisis varias + importación desmedida gracias a Martínez de Hoz). Ese stock generaba por si mismo costos extras: espacio de almacenamiento, seguros, custodias, posibilidad de deterioros y obsolescencia.
- Tercero: podía seguir fabricando, y aunque una parte de esa producción la vendiera al costo o incluso algo menos, esa producción le permitía absorber mejor sus costos fijos y su marca seguía presente en el mercado.
Poco tiempo después, ya en los 80's, los supermercados comenzaron a actuar como "bolseros".
La operatoria de los supermercados es desde siempre una cueva financiera: venden al contado (en efectivo, tarjeta de débito o tarjeta de crédito que cobran en pocos días) y a sus proveedores, con contadísimas excepciones (léase marcas "monstruo" con las que no se juega), les pagan como mínimo a 90 días. Y no sé si siguen teniendo la costumbre de exigir para cada nuevo local que inauguran una primera entrega "GRATIS"
Imaginen por un instante el volumen de dinero que representa el 80% de las ventas de tres meses de uno de esos supermercados (no hablemos ya de los "hiper").
Pues bien, en esa época, tenían más dinero que cualquier banco. Y eso les dejaba la mesa del festín preparada.
Cualquier fabricante de los productos que vendían que necesitara dinero, tenía la posibilidad de acordar con el "super" entregarle parte de su producción con otra etiqueta (la del super) a un precio mucho menor que el que llevaba su propia marca.
Así aparecieron las "marcas blancas". ¿O alguien puede creer que haya taaaaantas plantas que produzcan tomate triturado, café, té, pastas, azúcar, harina, etc.? No olvidemos que, además de las "marcas", existe otra "blanca" en cada cadena de supermercados que tiene el mismo producto y, generalmente, con un envase idéntico, pero más barato.
Es probable que hoy en día existan algunos productores independientes que solamente fabriquen y envasen sobre pedido las "marcas blancas", pero personalmente he visto productos con la "marca blanca" de un super XXXXX que, en letra pequeña, dice "producido y envasado para XXXXX por NNNNN" donde NNNNN es una de esas marcas reconocidas que se rasgan las vestiduras pidiendo que la gente compre marcas reconocidas.
Ellos crearon sus propios demonios.
En lugar de bajar los precios recortando sus márgenes de beneficio, prefirieron seguir a todo tren y malvender stocks, porque su idea era "prefiero rematar stocks o vender al costo pero sin marca, antes de bajar mi precio, porque mi marca tiene que seguir teniendo el XX% de margen, caiga quien caiga"
Otros optaron por inventarse la famosa "segunda marca" para vender lo mismo pero más barato, y así mantener el precio de la primera marca, con la idea de eliminarla cuando el mercado se recuperara.
Muy bien, ahora no se quejen amargamente. Esto lo crearon ustedes.
Ayer encontré este letrero:
La parte más interesante es, como siempre, la letra pequeña. Veámosla: (clikeando en la imagen puede verse a mayor tamaño)
Dice textualmente:"Nadie conoce las marcas líderes mejor que tú. Sabes que están ahí porque quieren darte la mejor calidad. Por eso confías en ellas, es una relación que se construye con los años y con la experiencia. Marcas líderes. Calidad, Innovación y confianza. Eliges tú"
Vayamos por partes:
"Sabes que están ahí porque quieren darte la mejor calidad"
Hubiese jurado que están ahí para obtener el mayor beneficio por la mínima calidad (costo) posible. Ahora resultan que son ONG's
"Innovación y confianza"
Veamos, reconozco que no tengo lo que se llama una buena memoria, pero recuerdo muy bien que muchas de esas marcas tradicionales incluyen en sus publicidades frases tales como:
"El de siempre", "A me los daban de pequeña, ¿cómo no se lo voy a dar a mis nietos?"
Si es "el de siempre" y esa abuela lo tomaba de pequeña, quiere decir que en los últimos 50 ó 60 años no cambió. ¿De qué innovación me hablan?
Todos sabemos que la estrategia habitual de las marcas establecidas es modificar el envase o la etiqueta, introducir una modificación ínfima en el producto y relanzarlo con el eslogan de "nuevo" o "mejorado" y con un precio desmesuradamente más alto para la "innovación" introducida.
Crearon en la gente el hábito de comprar marcas blancas o segundas marcar para ahorrarse un dinero cada vez más escaso. Las marcas blancas tienen en España, ya más del 30% de cuota de mercado, cuota que perdieron las marcas tradicionales.
Lo lamento, crearon un demonio que ahora se los está comiendo...... por mi parte seguiré con las marcas blancas. No estoy dispuesto a pagar un 30% más (por parte baja) para tener una etiqueta con un nombre más conocido, pero con un contenido idéntico
Es lo mismo que con la ropa. Una camiseta (remera) con la marca del super al que voy me cuesta 5 ó 6 euros y me dura por lo menos 3 años. Una con una marca reconocida me cuesta por lo menos 25 euros y no creo que me dure más. No lo pienso dos veces, es más, no lo pienso ni una sola vez, compro la de €5, y, como siempre, trato de aprovechar cuando las liquidan y las pago 2 ó 3 euritos. Y lo mismo hago con todos los productos: si existe una "marca NISU" (NISU madre la conoce) que cuesta x% menos que la conocida y su calidad es aceptable, no lo dudo.
Ya lo comenté en otro post (Nuestro "amigo" el banco). No estoy dispuesto a pagar con los sobreprecios las campañas multimillonarias, los edificios a todo lujo y los salarios y prebendas exorbitantes de los directivos de esas marcas tradicionales que "solo quieren darme la mejor calidad"
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